PERDER PESO: Resolución de Año Nuevo

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Una de las resoluciones de Año Nuevo de millones de personas será perder peso, luego de meses de confinamiento y una pandemia que impactó a muchos de diferentes maneras. Y aunque establecer la meta es la parte fácil, el desafío se encuentra en mantenerse motivado y enfocado, crear  nuevos hábitos e identificar aquellos que justamente permitieron la ganancia de peso. 

Si en algún momento dejas de perder peso, o incluso nuevamente vuelves a ganar lo perdido,  no puedes culpar a la dieta ni muchos menos a una condición metabólica y hormonal asociada, simplemente lo que ocurre es que pierdes la motivación o te cansas de los cambios o nuevos hábitos que has explorado; es por eso que el manejo nutricional del sobrepeso debe ser individualizado y acompañado por alguien que te permita identificar, reconocer y explorar con cambios que sean sostenibles en el tiempo para ti, que te permita establecer un estilo de vida que disfrutes y una estrategia de alimentación que la veas como autocuidado y no como sufrimiento ni mucho menos frustración de no poder comer. 

Volvemos a ganar peso porque nos cansamos del sacrificio que estamos haciendo, y si lo estamos viendo como un sacrificio entonces no es el método adecuado para nosotros, y debemos explorar con nuevas estrategias o enfoques. Nada desde el sufrimiento o la frustración es sano o sostenible. 

Un programa de pérdida de peso no es exitoso por la rapidez con que el individuo baja de peso; su éxito dependerá del mantenimiento en el tiempo del peso perdido y si esa persona logró identificar los hábitos, pensamientos y emociones asociadas a su conducta alimentaria. El cambio exitoso no está en el tamaño del estómago, ni en la supresión de grasas o carbohidratos, ni mucho menos en la medicación del hiperinsulinismo o hipotiroidismo (o cualquier otra condición); está en cómo cambiar nuestros pensamientos y sanar definitivamente nuestra relación con la comida y con nuestro cuerpo, está en dejar de ver a la comida como un sitio de refugio o alivio de frustraciones, ansiedad o mala gestión de emociones, está en dejar de ver los alimentos como única fuente de placer en nuestro día a día. 

Hasta que no cambiemos la manera en la que pensamos, la pérdida de peso  siempre estará entonces en nuestra lista de resoluciones anuales. 

¿Estás listo para explorar con estos cambios? Te espero con mi nuevo programa de pérdida de peso. Para más información contacta aquí.

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